Resumen:
La industria colombiana, para dar respuesta a los nuevos retos que demanda la economía mundial, han adquirido el principio productivo y administrativo del modelo japonés, llamado “Toyotista”. Modelo, compuesto por un sistema con naturaleza histórica y cultural propio de la sociedad japonés. Resumiéndolo en tres palabras, el éxito de la experiencia japonesa sería: tecnología, productividad y competitividad. Aquí radica el resultado económico de esta combinación perfecta, “lo que otros o no pueden o se tardan más en producir a pesar de usar los mismos ingredientes” (Ramírez, 2010). La globalización de las economías, ha generado que los países promuevan procesos de integración con la finalidad de liberalizar y armonizar el comercio mundial. Bajo este contexto, el sector empresarial e industrial juega un rol importante dentro de las propuestas para la elaboración de políticas comerciales de integración, que les permita disponer de los beneficios para ampliar sus redes de venta.