Resumen:
A fin de mantener en óptimo funcionamiento el organismo, es necesario realizar ejercicio físico de manera rutinaria, este ejercicio a su vez provoca cambios en el equilibrio homeostático del cuerpo, mismos que son de característica fisiológica y que provocan cambios transitorios en los parámetros normales de las sustancias excretadas en el organismo, concretamente proteínas. En la presente revisión, se aborda, exclusivamente, el análisis bioquímico de la orina como referente del estado de salud de los deportistas, tomando en consideración el caso presentado para su respectivo análisis. De esta manera se puede determinar que existen cambios transitorios en el contenido de la orina con un discreto aumento de las proteínas y hematíes presentes en la muestra obtenida, inmediatamente, después del esfuerzo físico. Al ser cambios transitorios no revisten importancia clínica significativa, si dentro de los controles posteriores al ejercicio físico y dentro de las veinticuatro a cuarenta y ocho horas siguientes los parámetros urinarios han regresado a la normalidad y no se mantienen elevados, por tal razón no son indicativos de una enfermedad renal, sino más bien la manifestación inequívoca de los procesos homeostáticos que se ponen en marcha en el organismo para conseguir mantener el equilibrio del medio interno, es decir, la homeostasis.
Descripción:
In order to maintain optimal performance in the body, it is necessary to exercise
routinely, this exercise in turn causes changes in the homeostatic balance of body,
which are same physiological characteristic and cause transient changes in the normal
parameters of excreted substances in the body, particularly proteins. In this review,
exclusively it deals with the biochemical analysis of urine as a benchmark of the health
of athletes, considering the case submitted for examination.
This way you can determine that there are transient changes in the content of the urine
with a slight increase of proteins and red blood cells present in the sample obtained
immediately after physical exertion. When transient changes are not important clinically
significant, if within the subsequent tests to exercise and within twenty-four to fortyeight
hours, the urinary parameters have returned to normal and not remain high, for
that reason they are not indicative of kidney disease, but rather the clear manifestation
of homeostatic processes that are launched in the body to achieve balance the internal
environment, that is to say, homeostasis.
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