Análisis económico de la producción de pollos broiler en el sitio las acacias del cantón Balsas

Abstract

El desarrollo de la avicultura en el Ecuador durante los últimos años ha sido notorio, ha jugado un papel relevante en la generación de empleo y riqueza, constituyéndose en un rubro importante del Producto Interno Bruto (PIB) agropecuario. A pesar de los problemas ocasionados por la crisis económica y la presencia del fenómeno del niño, la producción de pollos broiler se ha triplicado pasando de 56´300 000 aves en 1995 a un total de 161´000 000 en el 2004, esto demuestra su acelerado ritmo de crecimiento que la convierte en la principal actividad pecuaria frente a las diferentes explotaciones de carnes como la bovina y la porcina existentes en el país.El cantón Balsas ha sido partícipe de la actividad avícola desde el año de 1980 manteniendo en constante crecimiento su producción que actualmente se estima supera los 6´000 000 de pollos broiler al año repartido en granjas de unos 300 pequeños, medianos y grandes productores, constituyéndose en uno de los principales centros de producción nacional.Esta actividad en la actualidad se enfrenta a los retos que imponen los competidores en el mercado globalizado, los cuales obligan a ser más eficientes y productivos a los avicultores nacionales. Solo las empresas mejor preparadas podrán sostenerse en tal escenario. Es por esto que los productores avícolas deben ampliar su visión empresarial y manejar su negocio con herramientas de gestión como registros contables de producción, flujos de caja, entre otros, que les permitan controlar y monitorear el ritmo del negocio, de esta manera prepararse para generar ventajas competitivas, sostenibles económicamente y en el tiempo.La adopción de nuevas tecnologías de producción se presenta como una alternativa que en el largo plazo posibilitaría mejores resultados tanto en lo productivo como en lo económico; solo el adecuado aprovechamiento de los recursos propios, como la ventaja de la eficiencia de producción en volumen logrará que las empresas avícolas sobrevivan.